viernes, 23 de febrero de 2007

miércoles, 7 de febrero de 2007

Astillero Río Santiago recibirá subsidio del Ministerio de Educación de la Nación (5 de febrero de 2007)

ENSENADA, BUENOS AIRES, (Agencia Paco Urondo) Astillero Río Santiago (ARS) recibirá un subsidio de 140 mil pesos por parte del Ministerio de Educación de la Nación que se destinará a la compra de equipamiento y puesta en marcha de acciones formativas para la Escuela Técnica Astillero Río Santiago (ETARS). Este ambicioso proyecto fue presentado ante el organismo nacional por el Astillero Río Santiago en el año 2006 y en el mismo se destacó el carácter esencial de la inversión a mediano y largo plazo de la Escuela Técnica ubicada en la planta naval de Ensenada.

“La preparación de estos alumnos es primordial para el futuro de la Industria Naval argentina ya que de esta manera los proyectamos como futuros trabajadores y especialistas. Esta inversión que se llevará a cabo en nuestra Escuela no hace más que confirmar el esperanzador porvenir de esta industria y el interés y compromiso del gobierno nacional de acompañarnos en este proyecto tan importante” manifestó el Presidente del Astillero Río Santiago, Julio Urien. En conjunto con el Astillero Río Santiago, participarán de estas acciones formativas la Universidad Tecnológica Nacional, la Universidad Nacional de La Plata a través de la Facultad de Ingeniería y la Facultad de Bellas Artes. Asimismo la ETARS desarrollará cursos destinados a alumnos y docentes de las Escuelas Técnicas de Berisso y Ensenada. Dpto. Comunicación Institucional y Prensa Astillero Río Santiago (0221) 5217734 / 5217700 int. 7381.

martes, 6 de febrero de 2007

CONGRESO DE LA JP EVITA (Miércoles 20 de Diciembre de 2006)

Comisión Universidad

Introducción

Hacer nuestro encuentro en esta fecha no es casual; para los jóvenes que nos criamos y crecimos padeciendo y sufriendo las consecuencias del modelo neoliberal, el 20 de Diciembre es una fecha que debemos recordar. Ese día irrumpimos como generación dispuestos a derrocar y cuestionar el statu quo que nos había excluido del acceso a la educación, del trabajo, y que nos había desplazado a los márgenes de la vida política y social de nuestro país. Por eso el 20 fuimos a la Plaza, porque esa plaza es el símbolo de la disputa por el poder en nuestro país: ahí fuimos a pedirle a Evita la vicepresidencia para profundizar el cambio, ahí nos bombardearon cuando quisieron destruir el Proyecto de Liberación. Y ahí nos convocó Kirchner para decirnos que VOLVIMOS, volver a integrarnos a un modelo con Justicia Social, volver a reconstruir una Fuerza Política con vocación de protagonismo y poder, volver a reconstruir el Movimiento Nacional que necesitamos para construir el Proyecto Nacional.

Como jóvenes tenemos un desafío central en esta hora que nos toca vivir: dinamizar y transgredir mas allá de lo posible la actual situación. A nosotros no nos quita el sueño “colar” en una lista, tampoco nos interesa “ser los buenos pibes que agitan”. Estamos convencidos que la actual etapa está revolucionando las estructuras que posibilitaron la impunidad e injusticia, y que este proceso, sólo se fortalece si asumimos la tarea de construir sobre el conflicto social, única forma de darle proyección revolucionaria al Movimiento Nacional. Construir Poder Político Popular es la tarea central que tenemos como jóvenes. Cuando decimos que el Futuro es Nuestro no estamos arrojando una frase al viento, estamos afirmando nuestro lugar central para cambiar la Patria, estamos dejando en evidencia que nuestra única razón de existencia es mostrar que el cambio es posible y direccionarlo hacia una efectiva acción política de masas.

Construir Poder Popular en la Universidad

Hace poco menos de un año le dimos nombre a la herramienta que en el marco de la JP EVITA, tenía como responsabilidad construir en la Universidad: Movimiento Universitario EVITA.

Nuestro desafío está centrado en ser el punto de referencia del kirchnerismo en la universidad. Históricamente la universidad tiende a convertirse en reducto de los sectores que buscan frenar los procesos de transformación por derecha o por izquierda, arrastrando detrás suyo a los jóvenes en prácticas vanguardistas y extranjerizantes o en prácticas mercantilistas.

Por eso cuando decimos que nuestro objetivo central es ser referencia del kirchnerismo señalamos nuestra primer gran tarea: Discutir con el conjunto de nuestros compañeros en la universidad la importancia que tiene en esta etapa histórica pararse en la disputa central por el Poder; esto implicaría combatir todas aquellas estrategias desviacionistas que proponen las fuerzas que construyen centralmente en la universidad, este camino se realiza parándonos desde el “centro de gravedad” de la política nacional para acumular poder político.

Nuestro segundo nivel de intervención debe estar centrado en construir sobre el conflicto propio de nuestras universidades, esto es, montarnos sobre problemas existentes como también generar instancias donde seamos nosotros los que “pateemos el tablero”. En este nivel de intervención podemos rastrear distintos marcos de acción:

1- General-estructural, que abarca las discusiones en torno a la LES, la autonomía, los estatutos y formas de gobierno de nuestras casas de estudio.

2- Académico-político, en el cual discutamos la orientación de planes de estudio, los mecanismos de enseñaza, generemos seminarios, charlas y espacios paralelos de formación.

3- Extensión, utilizar esta herramienta como forma de intervención que busque quebrar aquella imagen de la “universidad isla”.

4- Gremial, pelear por los derechos que tenemos como estudiantes, como también tener protagonismo en Asambleas, bochazos etc.

Conjugando estos dos niveles de intervención estaremos asumiendo la doble tarea de ser la expresión del kirchnerismo hoy ausente, a la vez que nos paramos sobre los marcos posibles de acción reivindicativa de los estudiantes. Debemos regenerar el Movimiento Estudiantil hoy ausente, debemos dotar al kirchnerismo de una estrategia de intervención política en la universidad.

Es la movilización el factor central de politización, a través de la misma vamos a poder superar las prácticas de sectas, el ideologicismo y aislacionismo.

Operando sobre los dos niveles antes mencionados estaremos movilizando a los estudiantes en torno a la construcción del gobierno Nacional y Popular y su compromiso con la construcción de una Universidad en consonancia con este proceso.

Si la tarea es reconstruir el Movimiento Nacional, reconstruir el proyecto nacional. Es desafío de este espacio definir las bases para la reconstrucción universitaria y convertir esas definiciones en un accionar de masas efectivo.